Catalina aparece por el Memorial una tarde de sábado. Noviembre ya casi abre sus ojos y Catalina viene interesada en entrevistar a familiares de alguno (o algunos) de los 70 Detenidos Desaparecidos y Ejecutados de Paine. Catalina no tendrá resultado ese mismo día, pero no desiste.

A sus 21 años, Catalina Renault es una joven estudiante del tercer año de la carrera de Ciencias Políticas de la Universidad Católica. La profesora del ramo Historia de Chile Contemporánea, Nancy Nicholls, ha instruido un trabajo sobre Memoria y Derechos Humanos, y Catalina decide que debe ser sobre los 70 de Paine; o, más bien, sobre la firme memoria que atesoran de cada uno de ellos sus familiares.

Hecha de sus instrumentos audiovisuales, la joven painina emprende su viaje y asume el reto. Regresa en distintas ocasiones al Memorial para alcanzar su objetivo. Se reúne con familiares y es testigo presencial de la reunión que la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados de Paine (AFDDyE-Paine) realiza el primer miércoles de cada mes como rito sagrado de memoria y dignidad.

Catalina hace suyo ese encuentro cotidiano y lo graba a concho en su memoria y, a poco andar, nos habla de vuelta para decirnos que concluyó su trabajo académico. Sencilla como se presentó desde un principio, nos lo comparte.

Ahora es nuestro turno compartirlo con todas y todos. Nos pone alegría hacerlo. Le hace sentido a la tarea diaria de resguardar la memoria viva de los 70 de Paine. Le pone futuro, cuando de ella se hacen parte las nuevas generaciones. La memoria es futuro.

¡Gracias Catalina!

¡La Memoria no se rinde!