Contra toda la vorágine negacionista con la que -los menos- quisieron opacar la memoria permanente de un pueblo, septiembre fue intenso en dignidad y se repletó de esas memorias que durante 50 años han pretendido apagar. Irreductible, la exigencia de justicia se hizo todavía más vigente cuando -los menos- quisieron jugar al empate y “cerrar la página”, tras medio siglo de impunidad.

Y es esa fuerza imparable de nuestras memorias, lo que nos sigue moviendo. Porque nunca fue exclusivamente por los 50 años del golpe civil, militar y patronal de 1973. Así sean 100 años, ¡La Memoria no se Rinde!, hemos dicho y así continuará siendo. Y con ese ímpetu nos volcamos a este septiembre y, en su amanecer, rendimos el justo homenaje a las personas detenidas desaparecidas.

Septiembre fue también momento para el merecido y necesario homenaje y reconocimiento a las mujeres de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos de Paine.  Destacable la presencia de autoridades del gobierno y, muy especialmente, de la rectora de la Universidad de Chile, la primera mujer en ocupar ese cargo en la principal casa de estudios superiores del país. Lo propio nació desde el Prodemu, a partir del proyecto literario “Memoria de Mujeres de Paine”, en el que ha quedado plasmado el testimonio de medio siglo de lucha por verdad y justicia.

Testimonio de Carolina Oyarzo

 

Nuestro silencio es memoria

El recuerdo vivo de los 70 de Paine inundó los nobles corazones. Movió genuinamente la siempre desinteresada y memoriosa voluntad de la gente digna de Paine. Junto a la comunidad y sus organizaciones los conmemoramos. En las calles que sintieron sus pasos, cargamos sus retratos y coreamos fuerte sus nombres en la ‘Caminata del Silencio”.

 

El homenaje a los 70 paininos detenidos desaparecidos y ejecutados hace 50 años, se vivió también en otras latitudes. En la Facultad de Humanidades de la UC el profesor Leiva recibió el reconocimiento de la comunidad estudiantil y académica.  También en el vecino Buin, en Hospital y en el territorio popular San Ricardo, en La Pintana, su gente dijo presente en memoria de los 70 de Paine.

“No todo terminó cuando desapareció su familiar, sino que hay una lucha de años y años por la justicia que no es solamente la desaparición de su familiar”, fue una de las profundas razones que llevó al colectivo Mujeres, Resistencia y Memoria a impulsar un proyecto artístico que quisimos exponer en el Memorial. Adultos y estudiantes de distintos lugares visitaron la muestra.

Hace cincuenta años, la clase campesina de Paine surcaba con manos y uñas esa tierra que por décadas le fue negada. Hace 50 años, en Paine, la Reforma Agraria hacía cosechar alegría y esperanzas para mujeres y hombres.

Testimonio de Cecilia Pereira

Quedó grabado en Cullipeumo. Allí donde “… el viento de septiembre estremece nuestra memoria. Y estos cerros son testigos y testimonio de nuestra historia con su dolor, con su brutalidad, pero también con la dignidad de quienes supieron resistir hasta el último aliento”, rendimos homenaje a los campesinos fusilados la madrugada del 18 de septiembre de 1973. Un abrazo especial a su coraje, brindamos a don Alejandro Bustos, sobreviviente de aquel macabro episodio.

En el epílogo, y siempre en la profundidad seductora de Paine y sus parajes, nos convocamos en Chada para saludar la viva memoria de Cristian Cartagena Pérez, en una ceremonia que reunió a familiares, la comunidad de Paine y camaradas de militancia del profesor rural, detenido y desaparecido, también aquel oscuro 18 de septiembre.